sábado, 23 de febrero de 2019

Ser feliz

Hay que ser felices cuando hay oportunidad, ayer, mañana, un beso. Sino es posible, es la mejor oportunidad para aceptar la invitación. La felicidad es la imagen que no se ve detrás de la pantalla, es la mueca que no se explica, es el misterio de la muerte, es la aventura luego del telón.

No me disculpo, vivo de esto. Del misterio.

jueves, 16 de agosto de 2018

¿Qué hice para estar contigo?

Desde hace poco tiempo que te observo mientras me miras o haces tus cosas, y me pregunto ¿qué hice para estar contigo o para que estés conmigo? Antes pensaba que era normal querernos así, pero ahora me resulta extraño, por increíble.

Tengo miedo que haya sido la fortuna o la casualidad, porque no sabría con quién estar agradecida. Y lo estoy. Con el universo entero, conmigo también.

No entiendo cómo es que un día no existías, y al otro, ahí estabas en la misma fiesta, en la misma mesa, en la misma fecha. Y no bastó con encontrarnos, nos amamos. Y no bastó con sólo amarnos, nos cuidamos.

Sólo contigo puedo dormir en paz, con la certeza que ahí estarás en la mañana con tus ojos llenos de compasión y honestidad. ¿A quién le debo la fortuna de que siempre quieras escuchar? ¿A quién le debo la dicha de estar, al mismo tiempo, libre pero acompañada?

No importa lo que pase, estás ahí. Siempre. Y viceversa. Aunque sea un caos, así me quieres. Así te quise yo también, completo.

Y ahora a demás de estar agradecida, estoy feliz, porque el tiempo sigue y nosotros con el, a veces rápido, a veces tedioso, siempre exquisito estando juntos. Podemos escapar si queremos, en un abrazo atemporal que dura meses o segundos, en un beso viajero que nos lleve a descubrir nuestros deseos.

Porque no bastó con encontrarnos, amarnos, cuidarnos, ahora podemos soñar un sueño compartido, que se hace más grande porque no se divide sino se alimenta. Un sueño que no destruye a ninguno de los dos, nos fortalece.

Si esto no es una familia, declaro inaugurado al amor.







sábado, 21 de julio de 2018

Y sin embargo, tú

Después de un año, tú. Tan grande y yo tan poca, como siempre. Yo la danza, la ironía. Tú ambas y lo doble, enamorado y dueño, cazador y presa, poeta y líder. Yo sólo soy poesía de un país de mudos. Errante guerrera de lo invisible, guerrera pero libre, de nadie.

Al menos un día, medio día, una noche, un beso, una mirada, un deseo... pero tuya. Más que eso ya no quiero nada, lo tengo todo. No es tanto cuando tu abrazo es infinito. Y sin embargo, tú, tu poesía.

Somos dos seres fraguados de la misma noche, dos almas castigadas porque juntas entran en conflicto. Y sin embargo, tu maldita poesía que es fuego para mi alma.

Tenemos imaginación de sobra para imaginarnos amores, nos falta espacio. Nos falta tiempo. Nos falta libertad. Imagínate un amor conmigo, embriagante, alucinante, revolucionario, sin cadenas. No podemos. Y sin embargo, tú.

Mejor imagino que no existo, que estoy varada mientras tu navegas. Soy invisible, ingenua, mediocre, flaca, poca... en resumen muy poca distancia para tan larga meta.

Y sin embargo, tú.

viernes, 30 de junio de 2017

Te amo

Gracias

Por darme vida, más vida. Por ver en mi lo que construí con tanto esfuerzo. Por querer también lo malo. Por estar ahí siempre y sin condiciones. Por tu infinita paciencia. Por compartir tu vida. Por dormir conmigo pese a la tormenta. Por hacer de esa tormenta una noche tierna. Por besarme cuando despierto, cuando duermo, cuando lloro, cuando río, cuando hay motivo, cuando no hay pretexto. Por prestarme tu cuerpo. Por escuchar lo que me importa, por escuchar cuando divago. Por leer conmigo los domingos. Por querer a Gala y a Cira. Por el cuidado y el trabajo que me muestras. Por siempre ir conmigo, aunque haya examen. Por no temerle a los fantasmas. Por dejarme ver tus ojos. Por saber cómo regresarme de la oscuridad en la me meto a veces. Por hacer que mis días tengan futuros. Por dejarme recuerdos de Xilitla. Por darle un nuevo sentido a mi DF. Por bailar conmigo. Por reírte de mis chistes. Por desvelarte escuchando música. Por regresarte de la fiesta aunque sea temprano, por quedarte aunque sea tarde. Por dejarme ser lo que yo quiera. Por apoyarme a ser lo que yo quiera. Te amo sin ninguna duda.

miércoles, 26 de abril de 2017

Dices que me quieres, mejor dime para qué.

A veces no puedo enamorarme de ti, es decir, casi nunca. Yo quería encontrar en ti la paz, por fin el amor que no lastima... encontré a demás de lo que buscaba un amor que no siente NADA. 


Cautelosamente me quieres dar amor calculado, calendarizado y hasta presupuestado. Yo quería arder de pasión, de pensamientos de entrega infinita. Aun quiero, aun espero que puedas decirme que no quieres vivir sin "nosotros", pero me aburro esperando. 

Creo que ya no podré enamorarme más de ti, hasta aquí llega la imaginación que podía suplantar a la realidad. No puedo.

No tengo miedo, sólo tengo mucho frío. 


sábado, 25 de febrero de 2017

What is Jazz?

La única e insolente manera de reconocer que no conocemos el fin ni significado de una vida tan humana y mundana, tan pobre y desdichada, tan frágil y poderosa.

El jazz es un error que refleja a la perfección lo erróneo del mundo, cada tropiezo sincopado y melódico que se convierte en parte esencial de una historia contada e improvisada.

No hay ni siquiera un jazz, como no hay una sola forma de vivir, ni dentro de una misma vida. Cada pieza es una ventana a la niñez, a la adolescencia, al desamor, a la esperanza, al absurdo, al misterio y finalmente...

Finalmente es la muerte la que se toca a cada atrevimiento, porque somos desvergonzados los que vivimos de música, de jazz. Sabemos que no buscamos otra cosa más que la muerte pero tomamos el camino largo, el que la desafía abiertamente pero la abraza al mismo tiempo.

Toma lo que soy, muerte, porque no soy nada y aún así me atrevo a ser creadora, como si mi naturaleza no me importara. Puedo construir drama y silencio armoniosamente en una sola canción.

No te oigo pero te hablo. Eso es el jazz, una discusión insolente con la muerte, creando como si fuera un Dios que camina hacia el abismo voluntariamente.