martes, 5 de mayo de 2015

Sin Miedo



Estando así un poco sobria como estoy, te escribo para decirte que no quisiera más tiempo para estar juntos, porque comprendo perfectamente que sería un error inocente de las palabras. Tú me lo has dicho, todos tenemos exactamente las mismas horas en el día, por eso podemos usarlas para pensarnos como queramos. Entonces, como te digo, lo que hace falta es valor para decir lo que omitimos por no sufrir un poco en el futuro o mucho si es que esto vale la pena. Lo que falta son ganas de perder, de apostar lo último antes de marcharse, falta que queramos conocer lo que no podemos tener, probar lo que sería si te quedaras, borrar el futuro cierto y aventarse a extrañar a alguien. De cualquier manera estamos solos ante lo que viene, qué cambia si seguimos solos habiendo perdido un poco la cabeza. 

Aprovecho para decirte ahora lo que esconderé mañana, a medias como tú, pero a final de cuentas sin ganar ni perder nada, digo nada por no decir que ganamos dudas y perdemos miedos. 

Ojalá que esto sea un invento mío y no una gran idea de alguien. Ojalá que te vayas recordando momentos mediocres que no tocan angustias nocturnas ni provocan insomnios. 

Es fácil imaginar que ya te quise mientras no nos dimos cuenta de la hora, pero es mejor saber que como no te quiero todavía puedo irme sin anuncios ni preámbulos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario