sábado, 20 de octubre de 2012

Típico



Típico inicio para los que tememos ser criticados por alguien que no existe… hace mucho que no escribo, como si eso justificara cualquier error en la redacción u ortografía. Pero la verdad es que hace mucho que no escribo, y es porque cada vez  me pierdo más a mí misma, nunca tuve muy claro quien era, y menos ahora. Creo que escribo porque vengo de la Feria de Libro y así como uno se engenta de personas también me “engenté” de libros. Muchas páginas que comparadas con los minutos libres que tiene una vida, no alcanza ni para la mitad de ellas. 

Otra frase muy típica para comenzar un párrafo burdo es “No sé que sea el amor, pero…”, pues bien, yo no sé qué sea el amor, puesto que lo han ensalzado tanto, pero esto que a mí me toca es más bien una locura, muy romántica eso sí. El amor se vive solo, eso lo he aprendido no sé cómo y quizá equivocadamente, pero lo que le pasa a uno es imposible de transmitírselo a alguien mas y lo que yo quisiera vivir de alguien no me alcanza ni a rosar. Y eso es solo el inicio, no amar es vivir vacío, amar a alguien es vivir la soledad del amor. Francamente como dicen es un dilema y más bien un vicio.

Las cartas las escribo bastante bien, de todo tipo, para las ocasiones especiales, formales, y demás; más las cartas de amor que te dedico o te escribo, que a veces no te las doy porque el tiempo nunca coincide con nosotros. Como esa obra que he bailado tanto este año "Amor de morado", ellos no saben pero me toca tanto que a veces no sé qué papel interpretar, si el mío o el de la obra; pero quizá sí lo saben. 

Nada de esto me está gustando, no me gusta cuando no estás porque es como si el lector cerrara el libro, y yo? quién me lee a mí cuando no estás.

martes, 29 de mayo de 2012

El duelo...

El tiempo es lo que más me maravilla de este universo, el flujo constante que gracias a la vitalidad de las cosas hace que todo evolucione, se desgaste, se enriquezca o que cambie de alguna manera. Sin excepción del alma humana por supuesto, el tiempo es imposible de ser medido y se percibe de diferentes maneras, hasta dicen que en el Espacio tiene una duración muy diferente a la de la Tierra, y que la luz de las estrellas que vemos en realidad se ha extinguido hace millones de años, eso yo no lo aprehendo pero me espanta y me fascina a la vez. Cuando el alma sufre una pérdida, el paso del tiempo hace del evento algo totalmente insignificante, lo que nos pasa es que le tememos al presente y es en el presente donde debemos ser cuidadosos con nuestros actos; saber que solo somos los de ahora, que el pasado solo nos hace si lo recordamos, que nos creamos constantemente a cada instante. Creo saber que todos estamos solos, nadie nace pegado de su ser al ser de otro, pero esa soledad no es aislante sino que nos hace crear relaciones, sino fuera así no creo que el amor pudiera surgir nunca. Cuando perdemos a alguien querido resulta que los filamentos de amor se truncan pero nadie queda más solo que antes. Las relaciones humanas son lo más importante que tenemos, y hay que cuidarlas, nutrirlas y gestar el amor para crecer personalmente; sin embargo cuando una relación deja de existir hay que recordar que nos tenemos a nosotros con la ventaja de la experiencia y tomar las decisiones acertadas para nosotros. Perder a alguien nunca es fácil, un ser querido que se va inesperadamente nos deja desolados, sobre todo si era alguien cercano con quien no concebíamos la vida sin él, si no era tan cercano nos afecta de manera distinta, quizá nos haga ver la proximidad de la muerte y su indiscriminación, pero no siempre es la muerte la causante de rompimientos de las relaciones; la verdad es que perder a un ser totalmente ajeno a nosotros pero en el que poco a poco fomentamos la confianza y lo ligamos a nuestra existencia, también es parte de las tragedias comunes de esta y todas las épocas. Lo esencial es llevar el duelo necesario y de manera saludable y depositar toda nuestra confianza en el tiempo, nunca nos defraudará ni nos podrá mentir, confiar en que las cosas y las personas y todo lo que conforma al mundo se encuentra en un devenir constante y seguro. No hay  necesidad de racionalizar las cosas, entender ayuda a madurar pero igualmente envejeceremos todos, juntos como humanidad y solos como individuos. Hay que saber que el mundo nos crea y al mismo tiempo nosotros creamos al mundo; es decir, que no podemos escapar de relacionarnos con otros seres y que entre más fuertes sean nuestras relaciones, mejores llegaremos a ser nosotros mismos, entre más nos acerquemos a nuestro entorno, más nos conoceremos, y también entre mejor cultivemos nuestras virtudes, también seremos más aptos de sostener relaciones sanas y enriquecedoras. Lo único erróneo son los extremos: el aislamiento y la dependencia no encuentran el conocimiento ni el desarrollo; fuera de ello hay que valorarnos y valorar lo que nos rodea y ambas partes nunca dejarán de crecer juntas. Cuando alguna de las dos no funcione habrá que reflexionar y enmendar errores, si no tiene solución, entregarnos al duelo. Con el Tiempo a nuestro favor ya iremos cosechando los frutos de nosotros mismos. Es lo mágico de la vida, lo que ahora duele después se convierte en nuestra mayor fortaleza. Y como dijo Silvio R. "los amores cobardes no llegan a amores ni a historias se quedan ahí, y ni el recuerdo los puede salvar". Habrá que decidir ser virtuosos y valientes!

miércoles, 16 de mayo de 2012

Notas


Entre la senda hay un mirador, un mirador repleto de ciegos felices. Caminando. Por la contemplación, por la estática mañana, por la paciencia eterna de lo temporal, por aquello que pasaba. Caminando. Por lo fluctuante de lo venidero y lo sublime, sin detenernos a mirar. Largo tiempo, quizá vidas y un día cualquiera intrascendental. Un día de cansancio, nos detenemos no por el afán de mirar sino por la incapacidad de seguir caminado. Y vemos por fin.

miércoles, 9 de mayo de 2012

El problema de la libertad



¿Cuál es el problema actual de la libertad humana?

Parece que con tanto desarrollo, la famosa “sociedad de la información” nos ha llevado a la completa banalización y empobrecimiento de los principales valores y conceptos que en su esencia debían fundamentar nuestra vida. Lo inmediato a nosotros y cercano que se encuentra el conocimiento propicia el poco empeño que ponemos para emprender la búsqueda a profundidad de respuestas que ahora, pueden aparecer de pronto al hacer “click” en buscar. La voluntad se torna innecesaria. Al “hombre light” como lo llama Enrique Rojas[1] se le ha olvidado de donde viene y a donde va, y se ha hipnotizado en una vitrina de aparador. “Se fue a encontrarse a sí mismo y se perdió en el mundo de la moda” diría Jostein Gaarder. ¿Y cuál es la consecuencia de perder la conciencia de sí mismo y toda pretensión de trascender? ¿En dónde queda el hombre? ¿En donde queda el ser de ese hombre?
Si el hombre es libre porque es hombre o si la libertad crea al hombre, el problema es el mismo si se pierde la esencia de lo que es. No podremos construirnos ni crear voluntariamente la realidad, quedamos a expensas de los intereses que hemos construido y que ahora nos sobrepasan y lo que es peor, fuera de la consciencia; y como decía mi abuelo “La consciencia es la que rige los destinos de la humanidad”.
Libertad es una virtud del ser. Para Heidegger el ser no simplemente es lo presente e inmóvil, es un poder ser, y el lugar en donde el ser “puede ser” es en el mundo. La idea de que el hombre está en un mundo de objetos y de otros seres que definen al ser pero que a su vez necesitan de este para desarrollarse y alcanzar la existencia o bien su trascendencia, ya es en sí una definición de libertad. La libertad es poder, y se da dentro de límites que lo hacen posible, como el tiempo y el mundo.
Para el materialismo histórico, la libertad es el reconocimiento de la necesidad y la superación de esa necesidad. La libertad es la conciencia de la necesidad.[2] Aunque de esta manera, me parece que la libertad queda determinada por el desarrollo histórico o por las circunstancias, es decir, que el ser solo puede desarrollarse a sí mismo en su libertad de una sola manera correspondiente y no como una posibilidad de ser proyecto.
Hay mucho de se ha dicho de la libertad y aun así el problema persiste. ¿Será que olvidamos pensar en aquello que nos orienta a actuar o que nuestro sistema de pensamiento no superó la globalización ni el economicismo?
“Los problemas morales subsisten siempre, aunque sean diferentes, según los diferentes niveles. En el bloque oriental proceden de la coacción y la falta de libertad personal. En los países occidentales de la sociedad del bienestar, de la elevación a “virtud” del egoísmo consumidor (…) y de la pérdida de sentido de la vida”[3] La cuestión es adueñarnos de nuestra conciencia para regir(nos) y regir al mundo. Habrá que comprender el problema de la libertad para comprender nuestro propio ser histórico y libre, la libertad no nos sirve para indignarnos sino para sabernos dignos una vez más dentro de un mundo que nosotros aprehendemos y en el que somos.
El sitio de la libertad
Me parece que por medio del devenir dialéctico, ya sea idealista o materialista, caemos en una totalidad rígida que no permite un ser más allá de su propia superación; y cómo podemos justificar que ese Espíritu Absoluto es la plenitud en la trascendencia del ser humano sin dejar a un lado su individualidad. El hombre es la justificación de sí mismo y de sus posibilidades derivan también sus responsabilidades.
¿En qué sitio ubicar la libertad humana para permitir el desarrollo de la misma sin que quede subordinada a la estructura? Se me ocurre (con todos los años de estudio que me faltan y las desventajas que eso representa) que la libertad del hombre debe estar sobre los cimientos del todo, pero una libertad absoluta que no contenga la conciencia de la necesidad, ya que la conciencia solo la puede aportar el ser humano. La libertad es un medio en el que todo sucede, es puro “poder ser” y en donde el hombre se inserta de manera que puede asimilar su condición y aceptar su libertad, es decir, entender que es libre y a la vez que no es libre de no serlo. El punto de partida del hombre es una opción y su responsabilidad es educarse en su libertad desde su propia “naturaleza humana”.
El resultado de ser en la libertad, cuando la opción de poder sea justificada no por la libertad sino por el ser, será la moral. La moral será el desarrollo de la libertad interiorizada en el hombre y exteriorizada por sus actos, que no dependerá de la naturaleza ni será su justificación sino que creará el entendimiento del hombre acerca de su entorno; es decir, le dará una ideología.
Al estar el ser dentro de la libertad y al mismo tiempo desarrollando su existencia. (“La esencia del hombre es su existencia”[4]), se originará el individuo y solo a raíz de este se creará la sociedad.
Este desarrollo estará sostenido por interrelaciones estructurales de correspondencia en donde la sociedad corresponde al individuo, a la ideología, a la moral y por supuesto a la libertad. No es un desarrollo lineal ni excluyente, pero se permite un sistema social que no niegue, por el desarrollo y las relaciones de estructura, la naturaleza humana; que no niegue la individualidad y que sobre todo no subordine a la moral en función de la sociedad. la libertad plena se da en el ser y a través de él como una opción y la posibilidad de poder ser, siempre en función de sí mismo. Los actos no serán “buenos” o “malos” porque la moral o el derecho lo dictan, serán actos que desarrollen libremente el ser. 

Bibliografía
A. F. Shishkin. Ética Marxista. Grijalbo. México: 1966
Fernández del Riesgo, Manuel. La Ética y el marxismo. Revista española de investigaciones sociológicas, ISSN 0210-5233, Nº 2, 1978 , págs. 87-114
Rojas Osorio, Carlos. La Educación Moral. Inter-Ethica. Recuperado de http://ponce.inter.edu/nhp/contents/Inter_Ethica/pdf/educacion_moral.pdf
De Gasperín Gasperín, Rafael. La dignidad de la persona humana. Ponencia leída en el Primer Simposium Internacional de Ética en Instituciones de Salud Monterrey, Nuevo León. Mayo 2006.



[1] Rojas, E. El Hombre Light. México. Editorial Temas de hoy. (1998).

[2] A. F. Shishkin. Ética Marxista. Grijalbo. México: 1966 Pp. 111.

[3] Citado por Manuel Fernández del Riesgo.
[4] Vattimo, Gianni. Introducción a Heidegger. México: Gedisa. 2011

domingo, 8 de abril de 2012

Augurios, perspectivas..


Existen todo tipo de augurios que malignamente solo vemos hasta que lo que predecían nos acontece; justo ese momento en el que lo vemos todo tan claro y comenzamos a descubrir los indicios de cómo ciertos pormenores y detalles insignificantes que la memoria nos trae a la vista para hacernos sentir como completos ingenuos sin experiencia, ya nos anunciaban un cambio.
Una cosa es que la imaginación haya creado tantas y tantas variantes del futuro y en un momento contenido por la respiración expectante se derrumben haciendo que la sensación de que el peso nos sofoca sea lo único que sentimos en el cuerpo, y otra muy diferente es el palpitar de todo el ambiente al ir revisando en las filminas lo obvio de la situación y el dolor que no lastima porque no se sabe de donde viene y que nos pone en una sensación de estar parados en el espacio exterior. Una cosa es una cosa y la otra otra, pero ambas suelen ser las que me dan la perspectiva. Al final solo me alegro de seguir siendo yo y de no haberme perdido en el infinito.
Éramos una coreografía que salía alimentada por la iluminación divina y por la iluminación terrestre y también predijo su propio desenlace. Pero no lo vi hasta que lo vi y ya era demasiado tarde, aunque me pregunto qué hubiera hecho y si solo me hubiera anticipado con el miedo, que es peor a veces.. no es lo mismo fallecer de pronto que conocer el momento. No pudo haber sido más perfecto ni devastador de lo que ya fue, ni tampoco de otra manera.
Cuando uno sale librado de una tempestad todo lo que le queda es uno mismo y lo más preciado también; no iría por ahí compartiendo lo que se me quitó al que lo hizo y si lo pregunta dan ganas de salir corriendo para evitar la humillación. Hay quienes se alimentan del amor ajeno, yo también pero no cuando no lo quiero.
Vamos a luchar doblemente ahora por no querer lo que nos empuja y por acercarnos a querer eso mismo; digamos que vamos a luchar por querer sin querer demasiado.

miércoles, 4 de abril de 2012

Tolerancia "verdadera" y Paz


Tolerancia y Paz
¿Distingue la paz entre la tolerancia falsa de la verdadera? La verdadera y elevada tolerancia que se practica por seres dotados y moralmente autónomos, en donde la razón está en la ética y en la superioridad teórica. Encuentro peligroso confiar en hombres justos para que hagan valer y defender la paz mediante la tolerancia verdadera. Como el reclamo del Inquisidor a Cristo en “Los Hermanos Karamazov” – ¿Acaso solo eres el Dios de los virtuosos?- Se espera demasiado de los hombres y mientras tanto son los mismos hombres los que sufren y se indignan. La tolerancia es un Valor, con mayúscula porque el nombre impone, pero de todos los valores, individuales o universales, la tolerancia es quizá de los más trascendentes; es en la tolerancia donde se encuentra la paz entre las naciones, entre los individuos, la convivencia armoniosa, la diversidad, el enriquecimiento cultural y al final se descubre la dignidad misma de las personas, como un tesoro largamente olvidado, ¡se descubre el valor de un individuo! Mi pregunta es: ¿Qué importa la verdadera naturaleza de la tolerancia o de las intenciones si al fin y al cabo alcanza la paz verdadera? En este caso si el fin es la paz, los medios se justifican. En escenarios distintos no sería lo mismo amar por interés que amar incondicionalmente aunque al amado se le haga igualmente feliz, tampoco sería lo mismo repartir justicia por votos, que justicia por su valor moral; sin embargo en el escenario que se presentó por ejemplo en África, en donde la guerra civil en Ruanda originada por la intolerancia étnica resultó en uno de los mayores genocidios del siglo XX, a nadie le importa cuestionarse la magnitud de la indignación ni la intolerancia, ni tampoco la razón de tanta atrocidad: murieron millones y esa es la realidad. En una situación así la tolerancia de cualquier tipo no hubiese sido indigna, al contrario por ley o por credibilidad, o por cualquier otro motivo “mezquino”, si el gobierno hutu hubiese permitido la coexistencia con sus compatriotas tutsis se pudo haber evitado el parcial exterminio de estos últimos. La falsa tolerancia queda en quien la practica, pero la paz queda en todos. Y ¿cuál es la finalidad de un valor como la tolerancia o como cualquier otro? Es un fin en sí mismo o es la realización de otro fin superior. Dios “es” para ser el mejor dios que existe o para crear el mejor mundo posible. Sin el mundo no se entendería la existencia del valor supremo que es Dios, asimismo considero que sin su realización en el mundo real y contextual, en la forma de otro valor, dichos valores no se justifican y se quedan como puras quimeras.
Por otra parte se podría argumentar que habiendo procedido de una intención vulgar el fin es poco sólido, que en cuanto se rompan los intereses de aquellos que ostentan el poder y practican la tolerancia falsa, la paz también se verá comprometida, como pasó con tantos años de la historia de México desde su independencia. Pero la tolerancia se imprime en las personas y las sociedades y crea estructuras que sustenten los fines últimos que descubre, así nace el estado de derecho, las leyes, las costumbres, las normas, la moral de cada quien, etc., que cobran autonomía en lo tolerado independientemente ya del tolerante. Es necesaria la consciencia del tolerado de su condición para asumir su responsabilidad en la perpetuación de dicho estado de libertad, para preservar su derecho de ser.

Del Tiempo

Te quería contar del tiempo,
Del eterno retorno de nuestras decepciones.
Coincidir fue un gran logro.
Te llevo conociendo eternamente,
Y te seguiré perdiendo sin cambio.
Vivir, revivir, vivir, revivir...

Te quería contar de nuestra vida,
Del amor que sentí, siento y perdí constantemente ,
Del eterno retorno del amor,
Del presente que nos persigue hacia el futuro.

Te queriá contar de nuestras acciones,
Del momento que nos hacemos responsables.
Las concecuencias de los constante,
Del peso que un segundo creamos
Y hemos cargado desde siempre y para siempre.

Estoy mareada,
Cansada de vivir todas las horas del tiempo en cada instante.

Te quería contar del arte cuando no estas,
Del mundo en el que no vives.
¿Qué pasa con mi cara después de ver en mi reflejo?
Soy quien soy después de ti.

Te quería contar lo que he contado tantas veces hasta el infinito
A través de nuestra historia.
Lo que has oido e ignorado sin remedio.
Lo que has sabido dsde siempre
Y lo que no sabrás nunca.

Estoy cansada de repetirme;
Voy a escaparme del tiempo
Y respirar aire verdadero.
Vivir en la historia del libro que no se lee.
Extrañarte honestamente,
Solo una vez.
Acuérdate: "La cámara, detrás de la cámara, detrás de la cámara"

Consolation


Time is the dimension for space, with space objects and people can move from place to place and also worn out. Time has a very tricky pace and it amazes me how fulfilling a couple of weeks can be and how absurdly still and empty complete years turn out sometimes. A lot depends on choices and the amount of imagination we put in them, is what we decide to do with our time and space that makes living a day interesting. Though not always. If men were meant to know and worship, we should worship Time and prey for kindness. In a fair world wise people would have the right to die and all the others will live forever.
Have you been overwhelmed with joy for nothing in particular but for the amount of information collected?; An inspiring being, a piece of knowledge that has the potential of changing our lives, a glance of consciousness or any other idealistic experience. I was walking completely awake, receptive and dangerously sensitive. I was learning to feel; something that we usually wait to happen and react. I wanted to feel everything there is to enjoy and suffer, see, taste, listen, express and was in such a state of shifting molecules and uneasiness that I could cry, laugh or become upset just too fast.
I heard a Beatles song and only one person could know how much I enjoy “Beatles” in the mornings. That was the first time I saw him, but I forgot about it.
We like other persons for what they are and yet many times wish something was different. It’s true that what we wish to change is not the person itself but the circumstances, however if our past and present is the formula behind our essence, in the end we want to change what we think we love so much. Perhaps we are just afraid of loving the circumstances as they are and choose to love an ideal instead.
It’s a new city in an old soul feeling, a city that once belonged to another era and held people from a different world. Now it’s hoary façade with dim lights in the inside and computerized surprises. I was heading to the dance studios, something I do every day of my life. I look into a new canvas and get ready to paint. I don’t think I really paint anything, I just get ready; prepare myself for the artist I one day will be. I thought I was late even though I was about an hour before class started; it was just my anticipation, my desire to start working, to tell my body what I expect from it, I need to be stronger, I want complete obedience. I want others to feel what I feel.
I love riding the subway to work. I can be anything I choose to be in the time I spend in the subway cart. People have different professions but being a dancer is, to put it in words, different. I look different, I do my hair differently, I stand and think differently. However, if I want I can become part of the daily flow of energy and occupy my space as an uncountable or a part of the statistics in this living universe. You must know…
The story I want to tell it is not about me or my dancer life no matter how interesting it is to me or how much heart I invest in it. As I was saying I was in the commute on my way to start a new day (my day doesn’t start until I find my place at the bare and start warming up my feet), when I saw a street musician playing his guitar at the bottom of the stairs I used to get out and chose because they are the closest to the building I’ll be dancing in for the next nine hours. This person has long hair; he is thin but tall and modestly strong. He wears a loose brown jacket, not the kind of clothes that stand out because they fit and blend so well with the character that they become part of their essence and skin, not the kind you remember anyway like you would remember a person trying to make a statement or pretending to be a cartoon of something else. His eyes though were the eyes of a living human being. That might be because he indeed was a living person or perhaps because under the influence of Chopin’s Nocturne No 1 everything seems to take its true shape. Some people breathe and eat and even cry sometimes but the blood streaming through their veins is not exactly alive, or maybe it is just a diamond in the rough waiting for a conscious mind to come across them eventually in time. He seemed present, not exactly happy not exactly sad, but alive in the moment he was living. It took me a couple of days to figure out what cart I should get on, to be closer to the escalator I should use, to be closer to the exit stairs I should walk up, to be closer to the building I’ll be dancing in for the next nine hours of my day. It is about economize time and energy, or just playing with the possibilities in life. So it took me a couple of days to find him, but he was right there were he was and where I had to be or decided I had to be. I don’t know what he was playing; I was listening broken hearted to Chopin and his waterfalls of words and questions. The special thing about being a dancer is that you don’t go unnoticed or at least that’s what I thought because when I walked by that place I mentioned where all the coincidences in life for both of us happened, he looked at me and did what a polite and alive person does when another of the sort shares a brief and apparently insignificant glance. He smiled.
Being a different person, I do the same things everyday for as long as I have to, to become consistent; people say –don’t do the same things and expect different results-, I say practice the same things changing your approach and expect better results. In the end what matters is how you feel about your actions and not so much the result. It might just be my consolation. Next morning I headed to the studios with the same intentions and I saw this person again, he recognized me from the day before and not only have I got a smile but also a “good morning”. I felt like I belonged to the outside scenario, my presence there had changed somebody else’s reality and my whole existence left a mark in this world, which means without me this place would be completely different!
People learn, that’s what we do, me have memory and brains big enough to think. I am afraid knowledge is not always the way to happiness or success or any other purpose we try to acquire it for. Einstein used to say (or at least people now say he did), that you don’t really understand something until you can explain it to your grandmother. Have you ever tried to explain technology to your grandmother! The point for me is; first, acquired knowledge has to be completely neutral without tendencies as much as our receptive minds should be to gather that information; then it has to make a big enough impact on us to complement our principles and values, third we are so touched by this new ideas that we crave to share then. And last it is no longer an outside element, in fact it has become so much part of us that we are able to explain it so many times in a hundred different ways until the farthest person in the room can hear us, and that would be our grandmother!
More than three weeks had past, at that point I feel that I have a new friend, we somehow know a lot about each other. I have music playing in my head almost all the time and he probably ignores where I am going to everyday at the same time, but it doesn’t matter, we see deeper, we mutter the words good morning and smile and for almost five seconds share time. We know all that there is to know about five seconds in time.  
As my days go on I learn about consequences and responsibility. Improvising is all about choices; the easiest is being alone but has a lot more responsibilities. Every move of a dancer is a statement, every effort an attempt to create beauty or a way to send love. “I could fall in love with anyone, I love all people”. But that’s not me that is somebody else.
I see him today and my routine goes on as planned by the fortune. I see him every day and almost walk slower if he is facing the wrong way just so we exchange that matinee smile. Some day´s coordination fails but we make up the next as if nothing had happened.
I learned about being grateful. There are a thousand ways to kneel and kiss the ground. I’m not sure is about being grateful all the time but I find my ways to show it. I am most bitter most of the time; but it’s not the stillness, it’s the uncertainty.
It’s my forth week, I secretly have my hand in my pocket to turn my music down when I walk by him, he thinks I’m not listening, now we have even secrets, things we keep from each other. Our relationship is turning complicated. It makes it more powerful and engaging. I like his music but I like him more, it’s a happiness that only lasts an instant and vanishes for the rest of the day. A cup of coffee kind of happiness.
In some occasions when I miss his sight I feel guilty, I feel like a meeting I never appeared, I ditch him as if he was waiting for only me all morning and I never showed up. As the days pass my work gets harder and harder, as we get closer to the performance my body is fully aware of its own tiredness and capacity, in those days when I happen to get a ride and avoid walking, I feel like I tore the flyleaves of our story.
There is a lot in a woman that is kept in order to survive, is never shared but used and eaten piece by piece until is all gone and we are helpless. Men see it; unaware of what it is they really crave about us. Attraction. A stage is full of those secrets, life is laid out before our eyes but audiences go blind and except to forget about life with a magical performance, they miss the point. They see movement, they hear music, they succeed in leaving reality out; life goes unnoticed and all its mysteries. In the stage of us I try to listen but become an actor, in the spot light that only lasts the speed of my steps I want him to know. We are both alive, we are both present, we both smile and we both vanish.
I wonder what kind of friend he brought to play with him today. He is fully absorbed by him and their new play; when I walk by, he changes my roll into the smallest part, I’m part of the scenario, I’m the crowd. When did he become the director? Why I didn’t have the chance to know. “Improvise” I say to myself, like you would do in real life. I walk in front of them, feel betrayed and go on. I know the next day he’ll know and will smile to me again. He knows.
Artists walk and eat and take subways. Effort doesn’t always lead to art. A life in dance; a ship on waves. When the storm tells you there is nothing else you can do and you will drown and your embarkation will wreck but the sun is still there and land is still somewhere, there is really no option but keep sailing, drift. He doesn’t know and he doesn’t need to know I cry inside, I have dance dreams and dance realities. All I want is to be visible.
There are a few concrete images in life and those cement dreams, those are the memorable and consistent sparks. I was walking looking for mine to assure me I was still on earth and life was happening. Something was playing in my head, I think the song that says “Someday we’ll wave hello wishing we never waved goodbye”. I approach him, perhaps it’s time to take the next step and stop, but that would break the flow and I want to come back to the same river one day, although never the same. In front of me walks another person, too close to miss, after all I’m not the only one in the subway; nevertheless I know he will notice me. Instead, he… I can’t describe it. It made me sick, so blatantly innocent. So fictitiously natural and brazen, right there before me he smiles to her!, same complicity, same warmth, same presentness. I’m ashamed, so arrogant to think I’m there. My eyes see and my mind pesters me. I’m the crowd that fills the stage; he’s the actor we all conform. He plays for us and smiles to all of us because that is his roll; he sees a great black void in front.
He might be on stage but he is blind not me.
I come back of course next day and the day ahead, but I know and it’s not the same. He smiles and I react, we now pretend to create our days.
I’m gone now and time has changed. What kind of place this world would have been without my birth? To me: the big black void that is the audience. To everyone else: the lit scenario and everlasting play in an enclosed theatre. Unknown director.
Art is a cup of coffee kind of happiness.